Usando nuestro sitio web, acepta que su equipo almacene cookies y que se ejecute Google Analytics para ofrecerle el mejor servicio posible. Aquí encontrará más información.
Viena ha preparado todo tipo de sorpresas para los sibaritas y también para todos aquellos que prefieren divertirse. Y no sería Viena, sería extravagante, si no fuera acompañado de ese toque de encanto típico. Comprar en las tiendas insignia de marcas de lujo internacionales o de los antiguos proveedores de la Corte Imperial y Real. Comer en uno de los restaurantes gourmet galardonados por la Guía Michelín. Visitas exclusivas a museos o compras en subastas palaciegas de arte. Viena ofrece multitud de posibilidades para los huéspedes aficionados al lujo.