La artista Margarete Schütte-Lihotzky (1897-2000), nacida en Viena, marcó su época. Fue una de las primeras mujeres que estudió arquitectura en Viena y se la considera la primera mujer arquitecta vienesa que además ejerció ampliamente esta profesión. Tuvo un papel como precursora de la vivienda social, fue militante de los movimientos por los derechos de las mujeres, por la paz y la resistencia contra el nacionalsocialismo.

Y se la considera también la inventora de la cocina de módulos empotrados. En 1926, Schütte-Lihotzky diseñó la llamada cocina Frankfurt, el arquetipo de la cocina de módulos empotrados. Todo debía ser compacto y estar al alcance de la mano, pero sin dejar de tener un diseño atractivo. Esta cocina estandarizada se instaló en cerca de 10.000 viviendas. Sin embargo, esta alumna de Adolf Loos no quiso reducirse a eso a lo largo de su vida. «Yo no soy una cocina» es una de sus frases más célebres.

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Transformación en museo

Schütte-Lihotzky pasó los últimos 30 años de su vida en un apartamento de 55 metros cuadrados en la calle Franzensgasse en Wien-Margareten, el cual diseñó según sus propias especificaciones. Tras su muerte en el año 2000, el piso fue renovado y remodelado. El Club Margarete Schütte-Lihotzky, una asociación independiente fundada en 2013, hizo reconstruir el apartamento declarado monumento en 2021/22 para que hoy pueda verse tal y como era en la época de Schütte-Lihotzky. El apartamento y el jardín de la azotea de 35 metros cuadrados que lo complementa estuvieron sometidos a reformas durante un año. Se exponen muchos objetos de mobiliario originales, como lámparas, cortinas y mesas, además de mostrar conversaciones grabadas en vídeo con Margarete Schütte-Lihotzky. Uno de los elementos que más llama la atención es un tapiz kirguís de 100 años de antigüedad que ha sido cuidadosamente restaurado. 

En la actualidad, el museo hace las veces de sala de exposiciones y está abierto al público dos veces por semana (martes y viernes). Además, es un centro de investigación dedicado a la historia de las arquitectas austriacas. Ya desde el exterior, se puede apreciar a la excepcional arquitecta vienesa: un proyecto artístico en la pared cortafuegos que sobresale de la casa contigua evidencia a Schütte-Lihotzky. Allí puede verse un gran recorte de un retrato pintado, diseñado por el equipo de artistas PRINZpod.

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Tras el rastro de Margarete Schütte-Lihotzky

No obstante, actualmente también podemos encontrar a Margarete Schütte-Lihotzky en otros lugares de Viena, como por ejemplo la réplica de la cocina estilo Frankfurt del MAK - Museo de Artes Aplicadas. En colaboración con la arquitecta, el museo diseñó una recreación del modelo en 1989/90, que se puede ver en la colección permanente del museo. Además, el Margarete-Schütte-Lihotzky-Hof (en el distrito 21), la Schütte-Lihotzky-Weg (en el distrito 11) y el Margarete-Schütte-Lihotzky-Park (en el distrito 5) conmemoran a esta extraordinaria personalidad vienesa.

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