Un bar para bailar es algo que venía haciendo falta en Viena, un local con bebidas de calidad y buena música con la que moverse. Está claro que la pista de baile del Kleinod Prunkstück no tiene las mismas dimensiones que una discoteca, pero el buen ambiente no falta en absoluto. Si bien es cierto que esto último podría deberse a sus excelentes cócteles. Este bar, galardonado en varias ocasiones, es una de las coctelerías más populares de la ciudad.

El Kleinod Prunkstück ofrece numerosas bebidas exclusivas, además de una amplia carta de champanes y, por supuesto, cócteles de champán. La carta también incluye cócteles sin alcohol de creación propia. Además, se sirven deliciosos aperitivos.

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Un bar espléndido

El bar también destaca por su estética: el bronce, la madera oscura y el cuero tienen un protagonismo especial, y las mesas de ónice están iluminadas, todo lo cual recrea una atmósfera acogedora, cálida y atemporal. La música que se pincha abarca los géneros del funk, el soul, el disco y el house.